Mapa conceptual sobre la fonología infantil

Contenido

Durante mi investigación sobre fonología infantil, he desarrollado también un mapa conceptual exhaustivo sobre la fonología infantil en niños de hasta 6 años, con el objetivo de proporcionar una guía clara y concisa a los padres que tengan inquietudes o dudas en relación con el desarrollo fonológico de sus hijos. Este mapa se basa en los fundamentos teóricos de la fonología infantil y organiza la información de manera clara y jerárquica.

Al plantear este mapa conceptual, supe que quería que fuese claro de entender y a la misma vez fiable. Es por ello que he utilizado un lenguaje asequible pero con bastantes preguntas que aseguren una evaluación exhaustiva del desarrollo fonológico de cada caso particular.

El mapa conceptual ofrece una representación visual de las etapas de desarrollo y las características fonológicas típicas en cada etapa. Además, abarca aspectos fundamentales relacionados con el comportamiento del niño, esenciales para comprender también su desarrollo fonológico. Por otro lado, se incluyen pautas generales para evaluar el desarrollo fonológico y se ofrecen estrategias prácticas para fomentar y estimular el habla y la pronunciación adecuada en casa.

Se presenta como una herramienta accesible y útil para los padres, en la que se brinda información clara y organizada sobre el desarrollo del lenguaje de sus hijos. Al proporcionar una comprensión más profunda de las etapas normales del desarrollo fonológico y las posibles dificultades que puedan surgir, se busca formar a los padres para que identifiquen y aborden cualquier preocupación tempranamente. Es más, se incluyen también los casos en los que pueda haber un trastorno del lenguaje (bien aislado o bien como signo de otro trastorno mayor) y evidencias que puedan ayudar a diagnosticarlo.

Organización

Para llevarlo a cabo, he prestado atención a la organización rigurosa del mapa conceptual, asegurando la coherencia y precisión en la presentación de la información.

Lo he organizado en etapas específicas y breves que aseguren la rigurosidad en el abordaje del tema. Concretamente, lo he dividido en 8 etapas: en torno a 6 meses, en torno a 1 año, en torno a 1 año y medio, en torno a 2 años, en torno a 3 años, en torno a 4 años, en torno a 5 años y en torno a 6 años. En cada etapa, distingo los sonidos y patrones típicos que suelen desarrollar los niños en ese periodo. Asimismo, se han proporcionado estrategias prácticas y consejos para fomentar el desarrollo fonológico de sus hijos, como la práctica de juegos de sonidos, la lectura en voz alta y el modelo adecuado de la pronunciación. En caso de que estas prácticas se muestren insuficientes en el adecuado desarrollo fonológico, se recomienda a los padres que busquen la orientación de un especialista del lenguaje.

He dejado para las etapas finales ciertos aspectos de evaluación y diagnóstico fonológico que están reservados para especialistas en el lenguaje (aunque puedan servir de guía a los padres), como es la aplicación de pruebas específicas para evaluar procesos de simplificación fonológica o diagnosticar trastornos fonológicos.

Me gustaría hablar un poco sobre en qué consiste el Test para evaluar procesos de simplificación fonológica que añado en el mapa a partir de los 3 años. Señalan Pavez et al. (2009) que el Test para evaluar procesos de simplificación fonológica (TEPROSIF) es el único en nuestro país que puede servir para la detención temprana de trastornos fonológicos (p.12). Según estos autores, hay una eliminación paulatina de estos procesos hasta que se produce la palabra adulta (p.13). Ingram (1983, como se citó en Pavez et al., 2009), señala que el trastorno fonológico se caracteriza porque los niños presentan procesos de simplificación en una edad en la que ya deberían de haberlos eliminado (p.15).

Laura Bosch (1983) divide estos procesos de simplificación fonológica en tres tipos (pp. 97-98):

a) Procesos relativos a la estructura de la sílaba

Se incluyen los procesos que consisten en la reducción de sílabas, como puede ser la omisión de la consonante o la coda final (/relóχ / → /reló/), que puede aparecer en niños de hasta tres años. También se incluye el que afecta a la omisión de sílabas átonas (/bufáNda/ → /fáNda/), que lo podemos encontrar en niños de hasta cuatro años aproximadamente. Por último, la simplificación de grupos consonánticos a una consonante seguida de vocal (/préso/ → /péso/).

b) Procesos asimilatorios

Consiste en la asimilación de un segmento a otro próximo. Por ejemplo, /lúna/→ /núna/, en el que el segmento labial se asimila al nasal (Pavez et al., 2009, p.13). Podemos encontrar asimilaciones labiales, velares, dentales, etc., y contiguas o regresivas.

c) Procesos sustitutorios

Consisten en el cambio de fonemas de un tipo por otro de otro tipo, como por ejemplo, la sustitución de fricativas por oclusivas (/fléca/→ /pléca/).

Según Pavez et al. (2009), el número de procesos de simplificación fonológica y la edad que tenga el niño indican si este tiene un desempeño normal, de riesgo o deficitario en su desarrollo fonológico (p.45). Así, es importante tener en cuenta que si un niño con 3 o 4 años presenta un desempeño de riesgo no es necesario buscar la ayuda de un experto porque están en pleno desarrollo del lenguaje. Sin embargo, sí es recomendable ponerse en contacto con un especialista si tienen 5 o 6 años porque van a completar su desarrollo fonológico (p.50).

Resultado

Bibliografía

Bosch, L. (1983). Identificación de procesos fonológicos de simplificación en el habla infantil. Revista de Logopedia, Foniatría y Audiología, 3(2), 96-102.

Coloma, J. C., Pavez, M., Maggiolo, M. & Peñaloza, C. (2009). Test para evaluar procesos de simplificación fonológica. TEPROSIF-R. Tercera edición actualizada.